Ir al contenido principal
viaje a Oaxaca 
participantes: Marcella, Julieta, Ciro y yo. agradecimientos a Volaris por su ofertas de aniversario.  
como siempre los medios hacían ver la visita a Oaxaca como una mala idea, sobró quién nos dijera que tuviéramos cuidada, consejo que se agradece aunque una salga a caminar a Beca por la Liber. A final solo comprobaron el poder que tiene la tele sobre la economía de los estados y por ende sobre los políticos. Lo digo desde baja california que logró acomodar una novela sobre vivos y como siempre los afectados somos los borrachos porque los vinos buenos de B.C son carísimos. 

Admito que la topografía de la ciudad no era la ideal, sobretodo para Ciro (portero titular de Chula Vista Social Club)  que mide más de 6 pies y tenía que esquivar todos los lazos que sostenían las lonas que daban sombra al plantón. Ciro desde arriba logró darse cuenta de algo que para nosotros acá abajo era imposible percibir, existían lazos que no iban a ningún lugar, sin función específica, hilos que trazaban el espacio aéreo, lo dividían por el mero gusto de la demarcación.  A la vuelta de la costa el plantón se había marchado y de nuevo la ciudad recuperaba su habitual belleza. es difícil saber que es mejor ver, la lucha orgánica o la sucesión de monumentalidades impuestas. tengo que admitir que como turista la monumentalidad ganó por una buena tramo. 

 Oxaca se camina bien, lo que es su centro me da un poco de envidia. Tijuana Tiene un centro y también se camina bien pero sigue sin función de atracción, sigue como un centro de tiendas más que un centro de espacios públicos. no es un centro en el que me detengo a ver porque significa detenerte a comprar.




Mazunte rifó. hacía muchos años que no veía unas playas de este calibre. Me gustó el ritmo de vida, me pregunté si podría bajar el rito hasta ese punto y me respondí que no, luego me pregunté por qué no, luego me respondí que seguramente terminaría por aburrirme. eso si, con un bronceado muy chingón. 


 Marcella y Julieta entrando a Mazunte despues de una lárga caminada de San Agustinillo.
 el turisteo al full, con un presupuesto de 400 pesos diarios entre Marcella y yo, pudimos sobre vivir casi dos semanas. tengo que agradecer a  Daniela y Fito.  A Daniela por su plan de armar la biblioteca de Mazunte y a Fito por hospedarnos en su hostal la Vieja Sirena y darnos un muy buen precio.


Daniela, Pamela y Marcella, muy felices regresando de comer. 

 Daniela me organizó un par de cosas para dar inicio a las actividades del centro cultural Mazunte. una visita a la radio para leer algunos textos e invitar a la banda a caer a la cancha de basket para una lectura. en un momento de la lectura se escuchaban un chingo de pájaros, me atacaron los mosquitos y costaba trabajo escucharme a mi mismo con todo el sonido de la fauna y realmente me cuestioné la validez de la poesía en un lugar como Mazunte.  también leí para la secundaria en Santa María Huatulco y al final varios estudiantes me pidieron mi face y ya tengo un par de faceamigos, ya hasta me recomendaron la posadita las marías en Huatulco.  de ahí Daniela y Fito nos rolaron por Pluma Hidalgo, lugar del mejor café de méxico, el mundo y sus alrededores. lo creo.




 de regreso en Oxaca los grandes anfitriones Beto y Damián nos dieron un buen tour.

 logré expander los límites de Colonia Libertad


 conocimos gente muy chida
 nos dimos cuenta cómo se hace el Mezcal pero yo estaba muy crudo como para hacer las pruebas. Este rotoplas estaba lleno de ese líquido infernal (lo llamo infernal porque he visto a muchos poseidos por el diablo despues de unas cuantas gotas de esto)


Turisteo por la city: corte de pelo, Monte Albán etc

 este son los restos de una señora que datan de hace mucho y por las evidencias encontradas en su tumba las cuales puede uster ve en display aquí abajo
los arqueólogos Omar Pimienta y Marcella Vargas pudieron deducir que no era una noble pero tenía un lugar privilegiado en la sociedad Zapoteca dada su actividad, la creación y venta o trueque de nieves. el fragmento de una cucharita de plástico amarillo puesta en display bajo el cristal y a un costado de los otros objetos encontrados nos deja en claro la importancia de los refrigerios en la cultura Zapoteca desde aquel entonces.  

 aquí la arqueóloga muy sonriente después de un tour mezcalero y con mucha hambre espera su caldo de piedra.

al final del viaje pasamos dos días en DF. sacamos poco la cámara, coincidimos con mucha gente: Abril
Castro, Amaranta Caballero, Felipe Zúñiga, Lucía Sanromán, Maricela Guerrero, Julian Herbert. me topé a Hernán y Yaxkin pero la charla más larga y borracha fue con dos de los 5 Kikines: Costa y Andrei una charla que prevé que la visita a Tijuana que tienen preparada para Septiembre será buena.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Todos Invitados!

Sanfra

Muy agradecido con el poetry center de SF y con Tripwire por la invitación. Les comparto algo de lo que sucedió. Sanfra es y no es la misma.  nunca supe si esta silla de oficina es parte de las cosas que la gente saca a la calle porque no las necesita o simplemente el coworking ha llegado a niveles conceptuales increíbles. "The Poetry Center's  Tripwire Cross-Cultural Poetics Series  continues in its second year, as we welcome  Giancarlo Huapaya, Omar Pimienta , and  José Antonio Villarán —all three poets involved in the outstanding literary small publisher  Cardboard House Press , dedicated to work in translation from Latin America and Spain, and its offshoot,  Cartonera Collective " (del Flyer)  el jueves leímos e hicimos una especie de acción poética de asociación de conceptos con los que los tres trabajábamos, pudo quedar peor pero pudo también quedar mucho mejor.  esta foto es del gran Luie Navarro!   ...

Té (mi primer libro de cuento) ahí les va un sorbito. Agradecimientos a Ril Editores España

Té (mi primer libro de cuento) ahí les va un sip       Ril Editores España  Agradecimientos a RIL editores España y en especial a Paco Najarro por dejar el libro así de lindo. Mi primer libro de cuento ya pronto en librerías.                                                               ESPÉRAME En esta ciudad lo esperó 36 años. ¿Se da usted cuenta cuánto tiempo es eso? 36 años. ¿Tiene usted idea? Yo ni siquiera los he vivido. Cómo se atreve a venir ahora. Se lo voy a contar como lo viví porque no tengo otra forma de contárselo y porque por lo menos volvió y eso me hace querer más a mi padre, respetar su fe y odiarlo un poco más a usted, si se hubiera muerto por lo menos tendría excusa. Yo tenía 13 cuando llegaron a la casa dos amigos de él co...