Vine a tecolotlán a acompañar a mi padre, un tal Marcos Ramirez. El se fue del pueblo un día que su madre le dijo que para él ya no había más tortillas, tenía 12 años. Yo vine a teco a impedir que comiera muchas tortillas (por el diabetes) pero le dejo que como un par, porque me da miedo que se me vaya, un par nomas. Los Zepeda. mañana posteo los recuerdos de los Zepeda.
Comentarios
(qué maravilla)
Me dio gusto ver a Don Marcos, con su actitud desafiante como siempre.
Espero que estén bien, que sean felices cada día, que no les falte el amor.
Les mando un abrazo GRANDE.